Chetumal, QR; OCT 30.- Al menos veinte reos de alta peligrosidad que purgan condenas por delitos de homicidio, la mayoría de ellos sicarios confesos al servicio del crimen organizado, fueron enviados a cárceles en los estados de Chiapas y Oaxaca, informó en las últimas horas el secretario de Seguridad Pública en la entidad Alberto Capella Ibarra.
Esta es la respuesta que el gobierno federal dio como medida de apoyo para intentar despresurizar la ola de violencia desatada desde el interior de los penales en Quintana Roo, luego del asesinato del comandante custodios del Cereso de Cancún, José Carlos Ortiz Ontiveros, ejecutado el pasado 25 de octubre.
La noticia fue confirmada en un mensaje de Twitter por Alberto Capella, secretario de Seguridad Pública del estado de Quintana Roo. El funcionario lamentó los hechos y envió el pésame a familiares y amigos de Ortiz Ontiveros.
Capella calificó este hecho como un acto de cobardía y aseguró que “seremos implacables para dar con los cobardes y malditos responsables”.
“A las 6:44 horas de hoy ha sido cobardemente asesinado el comandante José Carlos Ortiz Ontiveros responsable de custodios del Cereso de Cancún. Nuestras condolencias y total apoyo a su familia. Seremos implacables para dar con los cobardes y malditos responsables”, abundó.
En este sentido a través de sus redes sociales confirmó que se generó una “cuerda” de reos de alta peligrosidad, relacionados con delitos de alto impacto, los cuales fueron trasladados a Centros de Reinserción Social Federales.
Comentó que se trata de delincuentes que son “los autores intelectuales” del crimen de dicho ex funcionario.
Explicó que con el apoyo de las autoridades federales se coordinó este operativo para trasladar a los reos a carceles de máxima seguridad en Chiapas y Oaxaca, para evitar más auto gobiernos, mientras se continúan con las investigaciones del homicidio de Ortíz Ontiveros.