No hay quien Frene las Extorsiones en Contra de Transportistas en la Costa de Chiapas

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  • Delincuentes cobran derecho de piso para dejarlos trabajar, o de lo contrario se «atienen a las consecuencias»
  • Comerciantes y organizaciones transportistas urgen a las autoridades que atiendan las denuncias realizadas
  • Anuncian paro de actividades en los próximos días

Tapachula, Chiapas, 14 de febrero de 2022.- El gremio transportistas y el sector comercial en la Costa de Chiapas está siendo severamente golpeado por delincuentes que se dedican a la extorsión, por medio del cobro de piso para dejarlos trabajar, o de lo contrario son atacados, con saldo de agresiones y varios muertos en los últimos meses.

Por ello, debido al reiterativo acoso y amenazas de muerte de los grupos criminales para obligarlos al pago de supuesta protección delincuencial, diversas sociedades cooperativas de taxis y colectivos de los municipios de la costa de Chiapas anunciaron que se están organizando para realizar un paro de actividades en los próximos días.

Los inconformes denunciaron que la presencia de grupos delictivos se está multiplicando con el cobro de piso que sigue estando vigente a pesar de autoridades han asegurado que lideres de estos grupos criminales están detenidos; sin embargo, las acciones delictivas se mantienen sin que haya autoridad que pu da pararlas.

Uno de los afectados, conocido como “El veloz”, chofer de un colectivo desde hace varios años en el municipio de Huixtla, detalló que ha sido alertado de que su vida corre peligro si su patrón no empieza a pagar “piso”, además de ser amenazado de que van a quemar dos unidades si no depositan la cuota de inicio, que corresponde a la cantidad de mil pesos, así como el pago de una cuota semanal permanente de 200 pesos a una cuenta bancaria.

El modus operandi de los delincuentes es el siguiente: uno de los delincuentes aparenta ser pasajero se sube a las unidades y recorre parte del trayecto, cuando considera que no corren riesgo saca una pistola y apunta al chofer, al mismo tiempo que entrega un teléfono de los llamados “cacahuatitos” que será el medio por el cual se comuniquen con los directivos de la cooperativa. Después ese individuo se baja de la unidad y aborda una motocicleta que ha seguido de cerca al colectivo.

Una vez que hicieron esto, empiezan las llamadas telefónicas a las organizaciones de transporte, los transportistas con el miedo no saben si hacer caso a la autoridad que refiere en muchos casos que no pasará nada o tener que pagar la cuota semanal.

Sin embargo, muchas de las veces acceden a las condiciones de los delincuentes, ya que estos conocen detalles, como números económicos de las unidades, domicilio de los concesionados, horarios y desplazamientos de sus familias, entre otros.

De ahí inicia «la negociación», que consiste básicamente en las amenazas, en las que los delincuentes usan lenguaje obseno para infundir temor, señalando que si no quieren tener problemas, velorios en sus casas, daños en vehículos o ser desaparecidos, deben de pagar la cuota señalada.

Además, los delincuentes afirman que tienen el amparo de las mismas autoridades, por lo que gozan de impunidad ante los crímenes, ataques y daños a unidades que han realizado.

Por ello, organizaciones de los municipios de Huixtla, Escuintla, Villa Comaltitlán, Acapetahua, Acacoyagua, Pijijiapan, Mapastepec, Tonalá, Tapachula, Suchiate y Tuxtla Chico, se están organizando para realizar el paro de actividades, y con ello exigir a las autoridades estatales que atiendan y combatan este delito.

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