- El inicio del 2022 se vislumbra como el más violento en años para Tapachula
- Casi todos los días ha habido ataques armados, agresiones y demás delitos que aún no han sido resueltos por las autoridades
Tapachula, Chiapas; enero 13.- Dos sujetos a bordo de un vehículo en movimiento fueron señalados como los presuntos autores de una agresión con arma de fuego en contra de Manuel N, de 34 años, abogado de profesión, quien alrededor de las 5 de la mañana de este jueves caminaba sobre la 18ª Oriente casi esquina con la 9ª Sur, a la altura del bar El Marinero, en el perímetro de la colonia 16 de septiembre.
De acuerdo a la versión de la víctima, indicó que dos hombres a bordo de un vehículo que nunca detuvo su marcha, se emparejaron y dispararon en su contra; de alguna forma los disparos sólo rozaron el hombro derecho del lesionado, quien fue atendido por paramédicos en el lugar, ya que no fue necesario su traslado a un hospital.
Los sospechosos se dieron a la fuga rápidamente y se perdieron de vista en calles hacia el sur de la ciudad; según las primeras declaraciones del abogado, aseguró que no tiene enemigos y que mucho menos tiene cuentas pendientes con alguien. Sobre las posibles líneas de investigación, afirmó que tiene toda la intensión de colaborar con las autoridades a pesar de que hay una probada desconfianza en las autoridades de justicia, empezando por la fiscalía de distrito y por las policías locales, de las cuales está comprobada su colusión con la delincuencia.
Esta agresión fue vinculada a la que minutos más temprano se informó, sufrió un conductor de la ruta Indeco-Centro, sin embargo de forma inmediata se desmintió; el clima de inseguridad que se vive en Tapachula al inicio de este 2022 marca un comienzo de año complicado en materia de seguridad y justiciacomo nunca antes los ojos están puestos sobre las autoridades y dependencias encargadas de la seguridad, las cifras no mienten, no son favorables en los resultados, se trata del inicio de año más violento del que se tenga registro en Tapachula.
La pérdida de confianza de la población en sus policías es preocupante, pero esto no preocupa a las autoridades, mientras sus boletines nieguen y digan lo contrario hay quienes se lo creen, pero el tapachulteco tiene cada día menos paciencia para esperar “resultados positivos”, mientras los servidores públicos de primer nivel tienen la seguridad de sus casas y de sus familias garantizada.
En tanto el fiscal del estado, el fiscal de distrito, los comandantes y directores viajan en autos blindados y con guaruras, el vecino de Indeco, Los Llanes, Centro, 11 de Septiembre, el de Suchiate, Tuxtla Chico y el de Mazatán vive con miedo de ir en la combi y ser asaltado, o que el chofer de la combi sea atacado a tiros y que una de esas balas le toque a él o a su familia, cuando lo único que querían era llegar con seguridad a sus casas. ¿De qué se trata?
Hoy más que nunca la frase de: “estábamos mejor cuando estábamos peor” tiene sentido; por encima del razonamiento común se impone la improvisación, se despacha desde la frivolidad y se imparte justicia por encargo; la frontera sur es un polvorín, lo que sucedió en Indeco ha sido calificado por la población en redes sociales como un ajuste de cuentas entre choferes que no sólo se dedican a conducir, pero debe ser la autoridad quien investigue. Sin embargo, ese es el tema, ¿quién investiga? La ineficacia de la fiscalía y de sus titulares se ve reflejada en el pésimo trabajo de los directores, comandantes y personal ministerial, es una cadena de errores que derivan en ingobernabilidad, expedientes van llenando los cajones y cajas en las oficinas de las fiscalías de distrito en Chiapas, mientras el titular no pude entregar cuentas claras al gobernador. Para ejemplo casos como Oxchuc donde se lavan las manos, los desaparecidos del tramo carretero Motozintla – Comitán, la mujeres violentadas y sin protección verdadera, los delitos de trata de personas, las ejecuciones en Suchiate y Tuxtla Chico, los innumerables casos de extorsión al transporte en Escuintla, Mapastepec, Villa Comaltitlán, Huixtla, Huehuetán y Tapachula, son alarmantes para la población, pero no para el fiscal en turno de Chiapas.
La evaluación sobre el desempeño de la Fiscalía General del Estado de Chiapas a la salida de Llaven Abarca y la llegada de Gómez Hernández, es que viene en picada y sin poder levantar, esto por un simple tema de capacidades. Llaven tenía voluntad de hacer, Olaf Gómez no sabe que es voluntad, en ello radica la diferencia.