Tapachula, Chiapas; NOV 10.- La mañana del pasado domingo 8 de noviembre a primera hora del día, elementos de La Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO), de la Fiscalía General de la República, arribaron vía aérea a la ciudad de Tapachula, para cumplimentar una orden de cateo otorgada por un juez en el municipio de Frontera Hidalgo, lugar en donde una investigación alertó de acciones ilícitas por aparte de células de la delincuencia organizada.
Las investigaciones basadas con información de inteligencia de la propia Fiscalía, ubicaron el domicilio en un camino de terracería de la comunidad de San Antonio, hasta donde se trasladaron los agentes especiales federales, apoyados por agentes de la Guardia Nacional, lograron asegurar un arsenal, que contenía armas largas de alto poder, así como armas cortas, cartuchos de diversos calibres, así como drogas con un peso de 25 kilos del alcaloide cocaína.
Lo asegurado consta de 10 armas largas, dos armas cortas, 51 cajas con cartuchos útiles, 27 cargadores y dos básculas grameras, además de teléfonos celulares y equipo de cómputo.
Durante esta intervención, los guardias nacionales también aseguraron en el predio, ocho caballos, 30 gallos de pelea y varias aves de corral, así como ocho vehículos y una motocicleta.
Dentro de la finca; fuentes cercanas al cateo confirmaron que se trata de integrantes del cártel de Sinaloa, que en esta región de la frontera sur controlan la totalidad del contrabando de armas y drogas procedentes de Guatemala.
Los dos detenidos –de los cuales no se dijo los nombres-, así como lo incautado fueron trasladados ante la fiscalía para ser puestos a disposición de un juez federal de control por los delitos de tráfico de armas, narcotráfico y manejo de recursos de procedencia ilícita.