- Los detenidos al parecer habrían secuestrado a una persona el pasado viernes al salir del Fraccionamiento Universitario
- La víctima es familiar de un General, lo cual generó el despliegue de militares y marinos para que se lograra su liberación
- El Comandante Molina alias “el Wacho” sería quien intervino en el operativo, ya que la víctima al parecer es quien le provee de armas para sus actividades fuera de la ley
Tapachula, Chiapas, 06 de octubre de 2024.- La tarde de este domingo se registró una fuerte movilización de las fuerzas federales en dos puntos de Tapachula, donde se realizaron cateos para desmembrar una célula ligada al Cártel del Golfo, quienes al parecer serían los responsables del secuestro de una persona ocurrido el pasado viernes 4 de octubre, así como del asesinato de dos personas, un adolescente y un adulto, ocurrido el miércoles en las cercanías de la Secundaria Federal Número 1.
Los cateos simultáneos ocurrieron en la colonia Magisterial, al oriente de la ciudad, así como en un inmueble ubicado en la 15ª Oriente, entre 7ª y 9ª Norte del Par Vial, donde se detuvo a siete personas y se puso bajo resguardo a dos menores de edad, además de lograr el aseguramiento de armas largas y cortas, cargadores, cartuchos útiles, chalecos antibalas, vehículos y diversas dosis de droga.
Los cateos forman parte de la respuesta a la denuncia en la que se indicaba que una persona, identificada como Luis Rey N, de 53 años de edad, habría sido secuestrado el pasado viernes 4 de octubre cuando salía de su domicilio ubicado en el Fraccionamiento Universitario a bordo de su vehículo Volkswagen Jetta de color negro, modelo 2024 con placas de Chiapas.
De pronto fue interceptado por tres personas, dos hombres y una mujer, quienes lo obligaron a descender de su unidad para posteriormente abordar otro vehículo en el que viajaban otras cuatro personas, mismos que lo habrían trasladado a una casa de seguridad ubicada en la comunidad Las Trozas del municipio de Tuxtla Chico.
Sin embargo, la víctima de secuestro resultó ser familiar del General de Brigada DEM Jesser Esaú Rincón Cruz, por lo que solicitaron la intervención de personal de la Policía de Investigación adscritos a la Comandancia Operativa de la Fiscalía Antisecuestros, para dar con el paradero de la víctima. Fue así como, tras realizar trabajos de inteligencia, se logró ubicar los dos inmuebles en Tapachula donde ocurrieron los cateos.
El primero ubicado sobre la 15a calle Oriente, entre 7a y 9a Avenida Norte del Par Vial, colonia Centro, donde se estableció vigilancia y se irrumpió lográndose la detención de Oscar Gilberto N, , alias «El Gil», de 46 años, originario de Soto La Marina, Tamaulipas, quien desde hace 3 meses, radica en Tapachula, Chiapas; Mauricio N, , de 39 años, originario de Soto La Marina, Tamaulipas, quien desde hace 1 mes, radica en Tapachula; y Francis Michelle Santos Hernández, de 23 años, originaria de Honduras, quien arribó al país hace 5 meses.
A estas personas se les aseguró 2 armas cortas, una pistola marca Pietro Beretta, calibre .9 mm, con 1 cargador, y una pistola marca Canik, calibre .9 mm, con 2 cargadores. Asimismo, en dicho Inmueble se localizó el vehículo de la marca Volkswagen, tipo Jetta, color negro, placas de circulación DRX-684-E de Chiapas, propiedad de la víctima.
Durante la detención, estas persona dieron información sobre el otro domicilio en el que se encontraban lo cómplices de la privación de la libertad de Luis Rey N; se trata del inmueble ubicado en el callejón Macedonio Alcalá de la colonia Magisterial, donde se logró la detención de cuatro personas, mismas que se identificaron como Ricardo N, alias “el Wero Mata”, de 35 años, originario de Matamoros, Tamaulipas, quien desde hace 6 meses radica en Tapachula; Ever N, alias “Huesos”, de 40 años, originario de Tapachula, quien empezó a trabajar hace 15 días; Glever Antonio N, alias “Gordo”, de 37 años, originario de Huehuetán, quien empezó a trabajar hace 15 días; y Ana Laura N, , de 38 años, originaria de Metapa de Domínguez, ex policía Municipal en dicho municipio, misma que empezó a trabajar hace 15 días en dicha célula criminal.
En este inmueble se aseguraron 5 armas largas (Marca Radom Poland, modelo Sporter, calibre 7.62 x 39 mm; Marca Micro Draco, calibre 7.62 x 39 mm; Marca Century Arms, calibre 7.62 x 39 mm; Marca Micro Draco, calibre 7.62 x 39 mm; y Marca Spikes Tactical Aporka Fl calibre 5.56 x 45 mm), así como 15 cargadores metálicos y 1 cargador de plástico, 4 chalecos balísticos de color negro, así como un vehículo marca Nissan, tipo NP300 Frontier, color blanco, modelo 2018, con placas de circulación DA-4651-A del estado de Chiapas.
Todas estas personas afirmaron pertenecer al Cártel del Golfo, y que se encontraban realizando una misión en Tapachula. Aquí es donde se empiezan a atar cabos. En la declaración, los presuntos delincuentes afirmaron que tenían órdenes de “levantar” a Luis Rey N, quien al parecer se dedica al robo de cargamentos de droga y armas de dicho cártel, y que al ser identificado, fue que arribaron a Tapachula para obligarlo a devolver lo que se robó.
Luis Rey, quien poco después de los cateos fue liberado, sería quien provee de de armas al comandante Ernesto Molina Aguilar, alias “La Muñeca” o “El Wacho, comandante regional de la Policía de Investigación en Tapachula, designado en la Fiscalía de Asuntos Relevantes, quien ha sido señalado en innumerables ocasiones de pactar con grupos criminales, así como estar al servicio de capos de la droga en diversas regiones de la entidad en las que ha desempeñado sus funciones.
No sólo eso, Luis Rey N es familiar de un General del Ejército, Jesser Esaú Rincón Cruz, quien sería el contacto con las autoridades que le brinda protección para hacer sus negocios fuera de la ley, además de arroparlo en los golpes que realiza a los cárteles rivales que operan en la región.
Este caso enturbia aun más la situación de violencia que se vive en la entidad, y sobre todo en la región Soconusco, al tratarse del involucramiento de funcionarios de primer nivel, tanto en las fuerzas armadas como en la misma Fiscalía del Estado, con personajes que cuentan con un negro historial en su haber.
Por si esto no fuera suficiente, el caso estaría ligado al asesinato de dos personas civiles ocurrido el pasado miércoles 2 de octubre, cuando en un enfrentamiento entre grupos criminales ocurrido en calles aledañas a la secundaria Federal Número 1, dos personas fueron acribilladas a balazos, al parecer sin ninguna razón más que ser testigos de la acción criminal.
En una vecindad un hombre de 47 años fue asesinado tras presenciar a varios sujetos armados disparar en una vivienda. Mientras que un jovencito de escasos 16 años y con toda una vida por delante, fue perseguido y asesinado de manera cobarde y a sangre fría en la puerta de su casa, sólo porque tuvo la osadía de grabar el hecho violento.
Existe un encono social en el que se exige a los tres niveles de gobierno que pongan un alto a la violencia y que se combata de manera frontal a los delincuentes y células criminales que operan en la región, para evitar que más sangre inocente sea derramada.
Porque queda demostrado que sólo tratándose de un familiar de alguien importante es como las autoridades agotan todos los medios y recursos para rescatar o hacer justicia a las víctimas, mientras que la gente inocente que no es influyente tiene que aguantar una larga espera para ver si obtienen justicia a las atrocidades cometidas por los delincuentes.
Es necesaria y hasta urgente una depuración de los mandos policiacos, de todo aquel que tiene en sus hombros señalamientos de corrupción y de vínculos con el crimen organizado para que se combata de manera verdadera a los grupos delincuenciales y no sólo sea una simulación.