- El cuerpo sin vida una persona fue localizado maniatado y con señas de tortura
Suchiate, Chiapas, 01 de abril de 2024.- La violencia que se vive en la región fronteriza y Soconusco parece no tener fin, y por el contrario cada día se agrava más y más. La presencia de grupos criminales que se disputan la plaza para el control de diversas actividades ilícitas ha dejado una estela de sangre y muerte difícil de borrar y que genera pánico y temor en la población.
La noche del lunes se registró el enésimo crimen violento en el peligroso municipio de Suchiate, donde un sujeto fue localizado sin vida y con señas de violencia extrema. El cuerpo fue hallado en la carretera a Jaritas, a la altura de la entrada al ejido Jesús, en el municipio de Suchiate.
El occiso presentaba impactos de bala al parecer del calibre .9 mm, además de lesiones en la cabeza con expulsión de masa encefálica. Asimismo quienes ultimaron a esta persona le dejaron un mensaje en el que reza: “esto le va pasar a quienes se dedican al robo, la extorsión y las violaciones. Hay más en la lista”.
Se trata de una persona del sexo masculino de aproximadamente 30 años de edad, quien vestía playera de color negro, pantalón de mezclilla. tenía las manos atadas con un lazo. Al arribar elementos de diversas corporaciones policiacas, no se halló ninguna identificación, por lo que quedó en calidad de desconocido.
Finalmente el cuerpo fue trasladado al SEMEFO para la necropsia de ley, donde se espera que alguien acuda a reclamarlo para darle cristiana sepultura.
Lo preocupante es que sólo forma parte de una amplia lista de víctimas de la violencia que impera en el municipio fronterizo de Suchiate. No se sabe si el occiso cometió algún delito o estaba envuelto en actividades ilícitas, lo que sí se sabe es que quienes lo asesinaron actuaron con total libertad, con la misma impunidad con que todos los días se cometen delitos en la frontera con Guatemala.
La falta de capacidad del gobierno municipal, aunado a la poca importancia a este tipo de casos de violencia, han provocado que la población le haya perdido la confianza a sus autoridades, mientras el temor sigue creciendo en un pueblo golpeado por la delincuencia e inseguridad. No hay muchas esperanzas de que algo vaya a mejorar. Por lo menos no en el corto plazo.