- El objetivo al parecer se trata de un supuesto integrante de un grupo delictivo
Tapachula, Chis., 30 de agosto de 2024.- En la ciudad de la furia, que es en lo que han convertido a Tapachula, ya no sabes quienes son los buenos, quienes los malos y quiénes los maletas, pero para saber de quienes son los últimos, sólo basta ver como se viola el “debido proceso” en una presunta detención que quedó en evidencia al interior de una tienda Coppel del sur de la ciudad.
De acuerdo con el testimonio de la gente -que incluso pudo grabar el hecho-, varios hombres disfrazados con chalecos con la leyenda “PDI” (Policía De Investigación) y que se decían ser policías ministeriales, intentaron detener a un hombre que incluso con movimientos torpes se les logró dar a la fuga.
Los hechos ocurrieron poco después del mediodía dentro de la tienda Coppel de la calle Calzada las Palmas frente a la plaza Crystal de esta ciudad, allí un hombre obeso iba a ser detenido por “madrinas” de la Fiscalía del estado, tres sujetos que portaban chalecos de los que cualquier persona puede pedir a TEMU o Shein, con calzado deportivo, jeans y gorras, con aspecto más de “halcones” que de efectivos ministeriales -por eso es que la gente duda de quién es quién-, que no pudieron al final realizar a detención, pero eso sí, intimidaron a clientes y trabajadores de Coppel, situación que con un buen bufete de abogados y con los testimonios al alcance, una buena demanda en contra de la fiscalía (si es que de allí son estos cuatro personajes), no se libran.
Este evento que no deja de ser bochornoso porque pone en evidencia la torpe actuación de cuatro supuestos policías que no lograron la detención de un solo hombre, “puso los pelos de punta” a los testigos. Y es que en medio de un clima de miedo con el que el huacalero vive en la ciudad luego de una serie de ejecuciones en calles, en la que por cierto no se ve un solo policía ministerial, la fallida detención en Coppel generó pánico en quienes se encontraban en la tienda.
A los pocos minutos un video comenzó a circular en redes sociales y se especuló que el supuesto objetivo de la “operación judicial” era ni más ni menos que un peligrosísimo integrante de un grupo del crimen organizado que según inteligencia militar es conocido como Julio César Moreno Pinzón que se pasea con el alias de El Tarjetas, presunto miembro del CJNG, quien ya había sido detenido hace algún tiempo en el municipio de Chiapa de Corzo, pero obtuvo su libertad de manera sospechosa porque el fiscal del MP no logró comprobar los delitos que se le imputaban.
Quienes allí estuvieron como testigos de lo sucedido, afirmaron que todo parecía ser actuado por momentos, “los supuestos ministeriales parecían más unos mamarrachos, hasta pensamos que todo era actuado, pero desde afuera se escuchaba a alguien que les gritaba a los hombres de adentro (de la tienda), “quieren negociar, quieren dinero esos putos”, todo esto mientras se jaloneaban entre ellos y los dizque polis amenazaban a la gente que los comenzó a grabar”, así se pronunció uno de los testigos de la tienda.
La persona a quien intentaban detener, exigía a los presuntos agentes de la PDI que le mostraran la orden de aprehensión, además de dejarlo llamar a un abogado; también les pidió llamar al Grupo GERI, para que “hablaran”, y que al parecer cuenta con contactos dentro de dicho grupo especial de la policía local. Sin embargo, presuntamente la detención no se concretó y finalmente a los pocos minutos un supuesto comando de hombres armados habría llegado a traer a El Tarjetas para llevárselo con rumbo desconocido.
Temas delicados.
Gente que presuntamente pertenece a grupos delictivos se infiltran en la sociedad, haciéndose pasar como ciudadanos comunes, no sabemos ni quien está a nuestro alrededor. De acuerdo al Departamento del Tesoro de los EEUU, El Tarjetas es uno de los más buscados en una lista por la que se ofrece una recompensa de 10,000,000 USD por información que lleve a su captura.
Y la segunda, es que la acción de los supuestos agentes de la PDI deja mucho que desear, al ejecutar operativos para detener a objetivos en lugares públicos y altamente concurridos y para colmo sin cumplir el propósito.
Este tipo de situaciones lo único que hace es alarmar el pueblo y ponerla en peligro ante un conato de enfrentamiento.
La acción de los supuestos agentes de la PDI, se explica tras confirmarse que forman parte de la Fiscalía de Asuntos Especiales, la cual está al mando del Comandante Ernesto Molina Aguilar, personaje con duros señalamientos de corrupción, abuso de poder y de estar ligado a grupos criminales.
Sobre la persona que pretendían detener, y quien es identificado como Julio César Moreno Pinzón, alias “el tarjetas”, líder regional del CJNG, existen antecedentes. Fue el pasado 15 de enero del presente año cuando localizaron el cuerpo de un hombre decapitado y colgado de un puente en la ciudad de Tuxtla Gutiérrez, donde además había una manta con un mensaje intimidatorio dirigido a El Tarjetas.