- El fatal accidente ocurrió a la altura del crucero Santa Cruz
- Traficantes continúan haciendo negocio con la vida de migrantes, a quienes les cobran hasta 2 mil 500 dólares para llevarlos a Tuxtla Gutiérrez o el Centro del País
- Camiones de carga son empleados para el trasiego de migrantes por la Costa de Chiapas
Bigvai Mendezcruz/Tucán
Pijijiapan, Chiapas, 01 de octubre de 2023.- La madrugada del domingo se registró el enésimo accidente en el que las víctimas fueron personas migrantes de origen cubano, quienes viajaban a bordo de una camión tipo tritón sobre la carretera Pijijiapan-Tonalá, el cual dejó como saldo al menos 10 personas fallecidas y 15 lesionados, entre ellos cuatro menores de edad.
Los hechos ocurrieron a la altura del kilómetro 134, como referencia donde se encuentra el crucero Santa Cruz, lugar en donde la unidad transitaba luego de haber burlado de manera inexplicable los demás retenes en la Costa de Chiapas.
De pronto al llegar al mencionado lugar, el conductor perdió el control de la unidad y terminó volcando sobre la carretera, para posteriormente darse a la fuga, dejando a las víctimas a su suerte.
Al lugar del accidente se presentó personal de Protección Civil, PEP, Policía Municipal y GN Sector Caminos, quienes auxiliaron a las víctimas, identificadas como migrantes de origen cubano. Lamentablemente en el lugar se contabilizaron 10 personas fallecidas, entre ellas un menor de edad, así como 15 lesionados, incluidos 4 menores de edad. Estas personas eran transportados de manera ilegal con la promesa de llegar al centro del país.
Sobre los traficantes, los habrían contactado en la región del Soconusco para iniciar el viaje, sin contar con el tráfico final. Los lesionados fueron trasladados a diversos hospitales, mientras que los fallecidos fueron trasladados al SEMEFO, donde se espera la intervención de }autoridades migratorias para realizar el trámite correspondiente.
En lo que va del año han sucedido infinidad de accidentes con saldos trágicos, como el último ocurrido en la región de Mezcalapa, donde dos migrantes fallecieron en iguales circunstancias; eran transportados junto a un grupo de indocumentados en un camión de carga cuando sufrieron el percance.
Este es el modus operandi de los traficantes o “polleros”, quienes por alguna razón que se presume pudiera tratarse de corrupción en los retenes, logran saltear la vigilancia y continúan su trayecto hacia su destino. Par ello son escoltados por vehículos o motociclistas, quienes van avisándoles sobre la presencia de autoridades o retenes.
Este se ha vuelto un negocio muy próspero, ya que a cada migrante le cobran hasta 2 mil 500 dólares por llevarlos a Tuxtla Gutiérrez o a la Ciudad de México. En pesos mexicanos, se calcula que son 40 mil pesos por persona, por 20 migrantes que viajan, se llega a una cifra cercana al millón de pesos por viaje. Esta es la ganancia que no quieren perder los polleros y por lo que se pelean en la región para el negocio del tráfico de migrantes.
Aunque en juego está la vida de quienes transportar, que por lo visto, muy poco les importa, puesto que ya pagaron y con ello acceden al riesgo de sufrir accidentes o la detención por parte de agentes migratorios que también quieren su parte del pastel.